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Jiron C. Arestegui, donde el vecindario se ha organizado. |
La Junta vecinal busca cerrar seis discotecas de los jirones Sandia, Lambayeque y Ladislao Butron. Ellos tiene el respaldo responsable de varios colegios privados y estatales que se han sumado a la cruzada pro la seguridad y contra la delincuencia.
Esto es consecuencia de una anterior Junta Vecinal. La del jirón Calixto Arestegui, que a finales del 2014 dió una lucha sin cuartel a mafias y locales informales, que finalmente se rindieron ante la organización del vecindario de la zona. Cerraron en las cuadras 7 y 8 por lo menos cuatro discotecas que tenían como fachada ser "indefensas tiendas o snacks". Los vecinos hacen vigilias periódicas hasta estos días
, una estrategia que les ha dado buenos resultados.
La acción no es casual. Los vecinos - como uno de sus dirigentes lo dijo - tenían la convicción de arrancar a los adolescentes y jóvenes de las garras de mafias inescrupulosas que fomentan el consumo del alcohol y la violencia. Otra convicción, es que si nadie se lo brinda tenían que ellos mismos generarse la seguridad para los vecinos.
Las autoridades del Comité Provincial de Seguridad Ciudadana, por cierto, no han hecho mucho por ser los vigilantes de la seguridad. Hay demasiada apatía.
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